SS Baychimo: el carguero que se negó a hundirse
El Baychimo era un buque de carga alemán construido en 1914 y operado por la Hudson’s Bay Company para transportar pieles en el norte de Canadá. En octubre de 1931, quedó atrapado en el hielo cerca de Alaska. La tripulación fue evacuada por aire, y el barco fue abandonado… pero no se hundió.
Durante los siguientes 38 años, el Baychimo fue avistado numerosas veces navegando a la deriva, sin tripulación, por las gélidas aguas del Ártico con una apariencia tétrica y de misterio. A veces solamente encallaba, otras reaparecía en lugares inesperados, como si fuese piloteado por un marino fantasma. Incluso hubo intentos fallidos de abordarlo y remolcarlo pero siempre quedó a la deriva en el océano.
¿Qué lo hace tan inquietante?
Sobrevivió décadas en condiciones extremas, sin hundirse ni desaparecer haciendo de su historia un mito, una leyenda llena de misterios e interrogantes.
Fue visto por cazadores de tesoros, exploradores y barcos mercantes hasta 1969. Nunca se encontró su casco hundido ni restos definitivos. Simplemente… desapareció.
El Baychimo se convirtió en leyenda viva del Ártico: un barco fantasma moderno, real, y resistente al olvido. Algunos lo llaman “el Holandés Errante del hielo” un verdadero enigma de los mares que flotaba en los océanos del Ártico.
